Los dos principales factores que intervienen en el estado de salud de la persona son las características genéticas y el estilo de vida. La mayor parte de las enfermedades tienen una base genética, pero el estilo de vida del individuo es el factor que determina qué patología puede desarrollar en el transcurso de los años. En México, la mayoría de las principales causas de muerte corresponden a enfermedades crónicas relacionadas directamente con las conductas asociadas al estilo de vida, que el propio individuo puede controlar, por ejemplo: diabetes y colesterol.
Están comprobados los beneficios de realizar ejercicio físico de manera habitual en la salud de las personas, tanto a nivel físico como mental.
Cuando un individuo decide comenzar una dieta, ya sea por motivos de salud o estéticos, ha de tener en cuenta que los resultados de dicha dieta siempre van a verse mejorados si se acompañan de la práctica de ejercicio. No hace falta que sea un ejercicio de mucha intensidad, sino simplemente ejercicio moderado y habitual, por ejemplo, caminar una hora al día. Si es por motivos de salud, mejorará entre otras cosas, la circulación y le protegerá contra la depresión. Si es por motivos estéticos, ayudará a que sus músculos y su figura tengan mejor tono.
Beneficios del ejercicio sobre el metabolismo
- Aumenta la capacidad de aprovechamiento del oxígeno que le llega al organismo por la circulación.
- Aumenta la actividad de las enzimas musculares, elementos que permiten un mejor metabolismo del músculo y, por ende, una menor necesidad de exigencia de trabajo cardiaco.
- Aumenta el consumo de grasas durante la actividad con lo que contribuye a la pérdida de peso.
- Colabora en la disminución del colesterol total y del colesterol LDL («malo») con aumento del colesterol HDL («bueno»).
- Mejora la tolerancia a la glucosa, favoreciendo el tratamiento de la diabetes. Incrementa la secreción y el trabajo de diferentes hormonas que contribuyen a la mejoría de las funciones del organismo.